EXAMEN DE CONCIENCIA SOBRE NUESTRA PRESENCIA EN REDES

43. Reconocer a nuestro prójimo digital es reconocer que la vida de toda persona nos concierne, incluso cuando su presencia (o ausencia) pasa a través de los medios digitales. "Los medios actuales permiten que nos comuniquemos y que compartamos conocimientos y afectos -escribe el Papa Francisco en Laudato si'-. Sin embargo, a veces también nos impiden tomar contacto directo con el dolor, con el temor, con la alegría del otro y con la complejidad de su experiencia personal"[20]. Ser buen prójimo en las redes sociales quiere decir estar presente en las historias de los demás, especialmente en las de quienes sufren. En otras palabras, abogar por mejores ambientes digitales no significa desviar la atención de los problemas concretos que padecen muchas personas -hambre y pobreza, migración forzada, guerra, enfermedad y soledad, por ejemplo-. Significa, en cambio, promover una visión integral de la vida humana, que hoy en día incluye la esfera digital. De hecho, las redes sociales pueden ser un medio para atraer la atención hacia esas realidades y generar solidaridad entre personas cercanas y lejanas.
44. En una visión de las redes sociales como un espacio no solo para las conexiones sino, en última instancia, para las relaciones, un buen "examen de conciencia" sobre nuestra presencia en las redes debería incluir tres relaciones vitales: con Dios, con el prójimo y con el ambiente que nos rodea[21]. Nuestras relaciones con los demás y con el ambiente deberían nutrir nuestra relación con Dios; y la relación con Dios, que es la más importante, debe ser visible en nuestra relación con los otros y con el ambiente.